Desde el 2016, un ingeniero de COPAIPA advirtió que el Mercado San Miguel debía tener una red contra incendios
El ingeniero Victor Alfieri, revisor de normas de seguridad y el ingeniero José Luis García, revisor de normas sismo resistentes, ambos del COPAIPA (Consejo Profesional de Agrimensores Ingenieros y Profesiones Afines de Salta), dialogaron con Daniel Murillo sobre las condiciones de seguridad del Mercado San Miguel y analizaron la estructura pre y post incendio.
“Hay un profesional que da sugerencias. Nosotros -COPAIPA- vemos que cumpla la normativa técnica. Después, eso va a los entes de habitación que tiene poder de policía y tiene que verificar que lo que dijo el profesional y lo que visó el COPAIPA sea lo que está en el lugar y en función de eso, se habilita”, explicó Alfieri. El COPAIPA tiene delegada la revisión de normas sísmicas, eléctricas, de higiene y seguridad; “nosotros revisamos proyectos, la policía de obra queda en mano de los municipios; no habilitamos ni autorizamos inicio de obras”, aclaró García.
Sobre el Mercado San Miguel, Alfieri remarcó que estuvo en la institución luego del incendio y resaltó: “Según el informe de bomberos esto ha sido un accidente. Pero todo se puede prevenir, si se hubieran hecho las cosas como corresponde. Hay que revisar si se cumplieron las normativas”. Asimismo, el estudio de Seguridad, que analiza las medidas contra incendios y evacuación, ya había advertido falencias en la institución.
“El mercado no tiene un red contra incendios, que estaba sugerido desde el 2016. El ingeniero Arce hizo este estudio. Luego de la revisión, estaba toda la normativa a cumplir”, dijo Alfieri y alertó que tampoco contaba con rociadores. En aquel momento, desde el Mercado presentaron un proyecto para cumplir con esta norma; sin embargo, no se aplicó.
“La red contra incendios es costosa; por lo que se le da un tiempo para la realización. Pero se le da un tiempo de protección previa; el plazo se lo da la Municipalidad y el departamentos de Bomberos”, explicó Alfieri. Asimismo, señaló que ante cualquier cambio estructural, comercial o de destino de un edificio debe hacerse un nuevo estudio de Seguridad; otra disposición que no cumplimentó el mercado, puesto que en numerosas oportunidades modificó disposiciones físicas, como la colocación de divisores de durlock o la creación de nuevos puestos, etc.