Ex asesora denuncia violencia laboral, precarización y abuso de poder de “Lula” Arias

Rosa Leonor, quien fue secretaria del concejal José Luis “Lula” Arias desde diciembre de 2023 hasta marzo de 2025, rompió el silencio y decidió denunciar públicamente las condiciones de trabajo que vivió durante su gestión. En una entrevista con la radio 96.5, relató su experiencia y cuestionó la moralidad y gestión del bloque político al que pertenece Arias.
Rosa explicó que llegó al espacio porque se encargaba de la agencia de comunicación y las radios vinculadas al bloque. Su vínculo con Arias se consolidó cuando fue designada secretaria, un rol que asumió con la expectativa de una gestión distinta: “Pensaba que iba a ser de otra manera”. Sin embargo, tras su salida, decidió hablar porque considera que “si bien no estoy en el espacio político ni busco nada, quiero que se investigue cómo manejan la plata y las oficinas, porque ellos se muestran con una moral que no tienen”.
Durante su trabajo, Rosa tuvo la responsabilidad de elaborar, presentar y firmar proyectos en nombre de Arias, debido a su ausencia: “Yo presentaba los proyectos, los realizaba y los firmaba porque él no estaba, y me tenía la confianza para hacer todo eso”. Esta falta de presencia y compromiso, sumada a la precarización laboral, la llevó a reclamar un aumento salarial que nunca llegó. Explicó que ingresó con un sueldo de 300 mil pesos y se fue con 325 mil, sin que se reflejara un mejor reconocimiento económico por la carga laboral que soportaba.
Además, Rosa denunció que debía cumplir jornadas dobles: “24/7 te tenían. Laborabas en la mañana en el Concejo y a la tarde en la agencia, pero solo te pagaban el sueldo del Concejo”. Esta situación se daba en un contexto de violencia verbal y abuso de poder, principalmente por parte de Arias, quien “cuando venía de mal humor, nos gritaba y exigía con malos modos”. A pesar de que ella pedía que la trataran con respeto, “uno se tenía que bancar eso porque había miedo a perder el trabajo”.
El miedo y la precarización laboral generaron que muchos compañeros abandonaran la agencia, pero Rosa subrayó que quienes quedaban “no estaban bien pagados y tenían que hacer política, campaña y otras actividades adicionales sin reconocimiento económico”.
Sobre la estructura interna del bloque, Rosa comentó que existen más de veinte asesores y secretarios, aunque ella solo conoció a seis. Esto la llevó a cuestionar “dónde están las demás personas y cómo se maneja ese dinero”, apuntando a una posible opacidad en la gestión de recursos. En relación con los medios de comunicación vinculados a Arias, aseguró que “él es el director y decide todo, aunque los medios no estén a su nombre, reciben pauta del Concejo, la Municipalidad y la Provincia”.
Rosa también reflexionó sobre el cambio en la actitud de Arias tras asumir la banca: “Cuando estaban en campaña, estaban al 100%, pero después de asumir, cambiaron y dejaron de salir a la calle. El entusiasmo se perdió”. Para ella, este alejamiento del trabajo con la gente evidencia una ruptura con el compromiso inicial.
Finalmente, su llamado fue a la transparencia y coherencia política: “No es para hacer daño, sino para que tengan la moral clara y no se golpeen el pecho por los otros concejales cuando ellos también tienen cosas ocultas”.