“No se escapó; no había orden de detención”: Era mula de droga, le explotaron las cápsulas, terminó en el hospital y cuando se recuperó, se fue
En los diez días que permaneció internado, pese a que el gerente del nosocomio notificó a la Fiscalía Federal, a Gendarmería Nacional y a Drogas Peligrosas de la Policía de Salta, nadie acusó recibo. El ciudadano boliviano había consumido 44 cápsulas de cocaína, recibió una atención por más de 5 millones de pesos en el hospital San Vicente de Paul, y una vez que se sintió mejor, se fue. “No dejamos custodia porque no hoy orden de detención”, dijeron.
Un insólito caso clarifica la situación en Salta. Ninguna fuerza de seguridad se hizo cargo de un ciudadano boliviano que consumió 44 cápsulas de cocaína, en rol de mula, por complicaciones ingresó al hospital San Vicente de Paul y como nadie había solicitado la detención y por tanto, no tenía custodia, como si nada, una vez que estuvo estable el hombre se retiró.
“El 18 de julio lo bajan de un remis y lo dejan en la puerta convulsando. El señor hace dos paros cardiorrespiratorios, supuestamente se le había roto una cápsula, pero uno no sabe cuando lo ve”, comenzó contando el gerente del nosocomio de Orán, Fabián Valenzuela, al ser consultado en El Murishow sobre lo que ocurrió con la “mula” que llevó a la provincia a ser noticia nacional.
El doctor explicó que una vez que se recuperó y estabilizó, el equipo médico advirtió la presencia de “cuerpos extraños” en el abdomen, a través de radiografías y tomografías, por lo que el hombre tuvo que someterse a una cirugía de forma urgente.
“Tomé contacto con la Fiscalía federal, Gendarmería nacional y Drogas Peligrosas de la provincia que se hicieron presentes”, contó Valenzuela y advirtió que los gendarmes “secuestraron la droga y los elementos del señor”, sin embargo, “no quedó custodia”.
Seguidamente, “el hombre pasó a terapia, quedó con respirador y yo pensaba que es difícil que se vaya y que se saque el espirador; pero se lo sacó y me expresó que se quería ir”, relató el gerente. Valenzuela dialogó entonces con la fiscalía y gendarmería sobre el pedido del hombre “y les dije me manifestó que se quería ir y que yo no veía a nadie que esté en el lugar”, detalló.
“Recibí un oficio, llegó gendarmería y me notificaron que como no estaba detenido no iba a tener custodia”, explicó y remarcó que, por tanto, lo trató “como a cualquier paciente”, por lo que este decidió irse. “No se escapó, solo se fue”, aclaró el médico, ya que numerosos medios de comunicación informaron que el hombre se había escapado. Además, aclaró que se transcurrieron 10 días desde que ingresó hasta que fue dado de alta.
Valenzuela resaltó que el ciudadano boliviano se fue dejando una deuda de 5, 5 millones de pesos por la atención médica que recibió. “Él se notificó, estaba lúcido y en el trascurso del mediodía tomó la decisión de irse; y nosotros no privamos de su libertad a nadie”, ratificó el gerente y aclaró que esto fue motivo de denuncia por parte del hospital.